Dos mineras, una misma historia de devastación
Hace un tiempo atrás, me pregunté sobre la educación y nuestra realidad: ¿Qué puedo hacer para construir un proyecto nacional del Perú?. ¡ Desde ese día, sólo puedo escribir estas líneas para ustedes, las que podrán heredar por esta Misión, que llevo muy dentro ¡.
,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,
Las empresas mineras deben cumplimiento al Estado peruano, expresado en el respeto al Estado de Derecho, la Constitución Política y la normativa legal atinente en el país; asimismo, con el compromiso real de una actuación social responsable, ética y transparente.
Ello no se cumple precisamente. Y pretenden seguir marcando la Agenda Gubernamental. Por lo que se recurre a la ideología publicitaria y extorsionadora, pregonando que la minería es la “santa salvadora” en nuestras divisas, en recaudación fiscal, en producto bruto interno, en inversión extranjera, entre otros factores macroeconómicos, que son meras matemáticas para una realidad socio-cultural y económica que demanda cambio material, total, integrador y sostenible, que no chorrean a la satisfacción real de las necesidades concretas de las familias, que no les sirven para alimento alguno.
Culturalmente, el encuentro y la interacción operativa entre un modo de producción capitalista y un sistema de vida tradicional andino, condicionan la necesidad de un proceso de adaptación y asimilación en este mundo rural, que profundiza su esencia interna; hace crisis de la identidad cultural, sin lograr a esta última, extinguirla; y poder utilizar el salario obtenido en su alcance vital campesino.
DE LA REALIDAD HISTÓRICA:
Morococha, es uno de los diez distritos de la Provincia de Yauli, ubicada en el Departamento de Junín, en la sierra central del Perú.
Su actividad minera se inició en 1,763, con más de 258 años de explotación al indígena y su tierra.
La penetración de la gran minería se inició con la empresa norteamericana “Cerro de Pasco Corporation”, que data desde 1901, con una mina de cobre, y una vez que fuera agotada, extrajo el plomo y el zinc. Actuó como un enclave económico, que sometió a las demás actividades del Valle del Mantaro de la sierra central del país. Así, su ciudad se convertiría en un mero cascarón urbano.
Esa minera fue expropiada por el Gobierno Militar de Juan Velazco Alvarado, el 01.ENE.1974, por las razones siguientes:
a. Incumplir sistemáticamente las obligaciones de higiene, vivienda y seguridad normativas; acumular grave y creciente déficit en instalaciones y equipamiento; presentar serias. deficiencias en hospitales, escuelas, saneamiento básico, seguridad y previsiones para enfermedades ocupacionales;
b. Contaminar las aguas de la laguna Huascacocha y de Ios ríos Rímac, Mantaro y San Juan, ni ha tomado acción para evitar dicha contaminación, para corregir Ios graves daños a la agricultura de !a región y a la fauna de Ios rios y de dlcha laguna;
c. No ejecutar proyectos específicos para evitar la contaminación ambiental, que reconoce produclr desde hace años por la actlvidad de la fundlción y de otras instalaclones metalúrgicas en La Oroya:
d. Manlfestar sistemáticamente su desinterés por desarrollar las actlvidades mlneras que tiene en el Perú, que se ha evidenciado por !a no puesta en explotaclón de extensas conceslones mineras. que en aplicación de normas legales, han revertldo al Estado;
e. Reducir notablemente sus labores de exploración y desarrollo en Ios yacimientos de Morococha, Yaurlcocha, San Cristóbal, Casapalca, Cobrlza y Cerro de Pasco;
f. Mermar acentuadamente sus stocks de materiales y equipos;
g. Presentar al Gobierno peruano, una oferta de venta de acciones o activos de la Cerro de Pasco Corporation, la cual declaró pérdldas en el ejerclcio 1971;
h. Explotar selectivamente las minas que tiene en concesión, extrayendo irracionalmente sólo el mineral de mas alta ley, lo cual resulta leslvo al interés nacional;
i. Presentar dicha empresa trasnacional, una evaluación económica a futuro, con resultados seriamente negatlvos, si no se ejecutan varios proyectos de expansión para garantizar su rentabilidad;
j. Retlrar públicamente con engaños, su oferta de venta al Estado, una vez conocida la evaluación del literal anterior, frustrando el inlclo de !as negociaciones en que se acordaría el precio de la transferencia de la empresa y su forma de pago;
k. Suspender embarques lmportantes con materiales y equlpos lndlspensables para el normal desarrollo de las actividades de la empresa, con el evldente propósito de dañar al país.
l. Retener lndebidamente en Ios Eslados Unldos de América, el lmporte de venta de minerales resultantes de las explotaciones de la empresa en el Perú, con riesgo de iliquidez, en el pago de sueldos y salarios y otras obligaciones a terceros.
Luego, “Cerro de Pasco Corporation” pasó a denominarse como la empresa estatal “Centromin Perú”; la misma que en el año 2003, fue privatizada por el gobierno de Alejandro Toledo; mientras en el 2007, las empresas que ganaron los concursos de privatización, fueron adquiridas por otra gran minera de bandera china “Aluminiun Corporation of China” – Chinalco, que pasó a operar en esta Patria, a través de su subsidiaria, la Minera Chinalco Perú S.A., la misma que para operar, reubicó a la población de Morococha en otra ciudad.
Del reasentamiento poblacional de la ciudad de Morococha:
El traslado de sus pobladores hacia una nueva ciudad, generó problemas sociales, económicos y comunitarios. El balance posterior, efectuado a ocho años de su reubicación, es de desaciertos de la empresa minera china, cometidos en el proceso de reasentamiento.
Se trata del Proyecto Toromocho de la Minera Chinalco Perú. En su historia, Morococha prodigó proyectos de exploración y explotación de yacimientos mineros, que la convirtieron en uno de los distritos mineros más importantes del Perú. Así, Toromocho representa un yacimiento de nivel mundial, por sus grandes reservas de cobre y molibdeno, y por su capacidad de procesar alrededor de 117,200 toneladas diarias de mineral, en una mina de tajo abierto y con una reserva futura para 36 años, por 1,526 millones de toneladas de mineral.
Debe resaltarse que, el área de alcance del Proyecto Toromocho incluye la zona urbana de la ciudad de Morococha (de 5,000 habitantes). A partir del 2006 se inició el proceso de participación ciudadana en audiencias públicas, a fin de reubicar a los pobladores en un área apta, fuera del alcance de cualquier infraestructura del Proyecto Minero. El desarrollo y puesta en operación de la mina Toromocho, incluyó desde el año 2009, a la empresa “Social Capital Group” (SCG) para que gestionara el proceso de reasentamiento a la nueva ciudad de Morococha. La mudanza se inició en el 2012, durando un quinquenio abierto.
Cabe preguntarse ¿Cómo la empresa y el Estado condujeron uno de los procesos de reasentamiento conocido por su gran extensión?: fue un proceso de desencuentros entre las partes, porque por idiosincrasia natural y esperable en nuestros hermanos compatriotas, la mitad de los pobladores no aceptaron dejar sus viviendas, motivado en un sentido de pertenencia, vínculo cultural y arraigo con su tierra de Morococha (el arraigo colectivo que lo vincula al terruño, como nos ilustró el Amauta José Carlos Mariátegui).
Consecuencias del reasentamiento:
· El cambio de la antigua ciudad de Morococha se hizo por la mina y las explosiones, respondieron escolares menores de 15 años de edad. Mientras, el número de estudiantes escolares disminuye anualmente.
· 70 familias se resistieron al desplazamiento y habitan en la Antigua Morococha, a metros de la mina a tajo abierto, con sus detonaciones de dinamita incluidas.
· La minera no informó a la población, sobre la presencia de metales pesados en el suelo (los cancerígenos arsénico y plomo exceden los límites de tolerancia), donde se construyó la nueva ciudad de Morococha (con 1,200 familias desplazadas). Entonces, menos les detalló qué acciones fueron ejecutadas para descontaminar esos suelos. Pero, sus indicadores son comparables con el suelo de La Oroya, ciudad que durante años estuvo en el ránking mundial de las urbes más contaminadas del planeta.
· La pobreza se ha duplicado al 8%. Se perdieron salarios y empleos. La cuarta parte de la población tiene ingresos menores a 500 soles. Existe empobrecimiento, migración, crisis de identidad cultural, debilitamiento de instituciones y de redes sociales, etc.
· Las calles de la Nueva Morococha (o “Carhuacoto”) lucen desiertas, las casas se alquilan o venden, los negocios sin mayor actividad, no existen clientes.
· No hay un espacio de mejor calidad de vida para todos, como aseveró Chinalco. Subsiste el dilema de los metales; ante la ausencia estatal, no se dió la aprobación del Estudio de Impacto Ambiental del reasentamiento, incluyendo su discusión, debate y revisión previas. Los mapas del EIA del proyecto Toromocho, así lo confirman.
SITUACIÓN JUDICIAL ACTUAL:
Los pobladores no reasentados por la minera Chinalco, de la antigua ciudad de Morococha, ante el despojo de sus derechos fundamentales (Como por ejemplo: La compañía no les reconoció el derecho de propiedad a sus residentes originarios al momento de proponerles un monto de compra por su inmueble), presentaron una demanda de Habeas Corpus contra dicha minera.
Por lo que, el Poder Judicial les acaba de dar la razón y reconoce sus derechos constitucionales “a vivir dignamente, a su integridad moral, psíquica y física y al libre desarrollo y bienestar“. También les reconoce, el derecho al libre tránsito de los pobladores, luego que la minera les cerrara el acceso a sus propias viviendas ancestrales, po lo que las familias que se quedaron tuvieron que aprender a vivir entre los desechos y escombros, sin posta médica ni comisaría, inexistencia de energía eléctrica, no tienen acceso a la tecnología, se les ha destruido las vías de acceso y los pobladores tuvieron que arreglarlas.
Sugerencias a las Autoridades, Dirigentes Comunales y población de Nueva Morococha:
1. Alianzas estratégicas con entidades públicas, instituciones, y organizaciones del sector social (como las ONG), para fines de prevenir y combatir el impacto ambiental; así como, mejorar la relación entre empresa y pobladores, con seguimiento, monitoreo y acompañamiento, a fin de permitir la posibilidad de desarrollo para sus habitantes
2. Efectuar estudios que determinen los niveles actuales de metales pesados, tomando muestras de análisis de la tierra, por ejemplo, en jardines internos y externos de las casas (canchas, parques, etc.).
3. Una medida para remediar los suelos y la tierra de Agricultura, con metales pesados, es tratarlos utilizando la cal.
4. Deberá coordinarse, este antiguo tema ambiental del proyecto Toromocho, con el Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA).
Respecto a la antigua Morococha:
1. Se deberá coordinar con la Superintendencia Nacional de Bienes Estatales, sobre la anulación de la expropiación de terrenos de los pobladores y de la municipalidad de Morococha a favor de Chinalco; y
2. Coordinar con el Servicio Nacional de Certificación Ambiental para las Inversiones Sostenibles, sobre la anulación de la Modificatoria del Estudio Ambiental de Chinalco; debiendo cumplir con el EIA original, y con reasentar a toda la población antes del inicio de sus operaciones, como prometió.
Muchas gracias por su lectura.
Por: Alberto Quedas (NOV.2021).