CAPÍTULO I – SOBRE LA NATURALEZA DEL PARTIDO

PERÚ LIBRE es una organización de izquierda socialista que reafirma su corriente ideológica, política y programática. Para ser de izquierda  se necesita abrazar la teoría marxista y bajo su luz interpretar todos los  fenómenos que ocurren en la sociedad mundial, continental y nacional,  sus causas y efectos, y a partir de ese diagnóstico plantear criterios de  solución que conlleven a la satisfacción de las mayorías. Asimismo, los  postulados mariateguístas, son de vital importancia respecto de nuestra  realidad nacional, latinoamericana e inclusive mundial. 

Por tanto, decirse de izquierda cuando no nos reconocernos marxistas, leninistas o mariateguístas, es simplemente obrar en favor de la  derecha con decoro de la más alta hipocresía. Partidariamente no  hemos encontrado otra forma de interpretar el mundo de manera más  coherente, inteligente y sobre todo científica sobre el tránsito de la  humanidad en su afán de dominar la naturaleza y, una vez alcanzada ésta, en lograr su propio dominio estableciendo una permanente clases sociales. 

Es el Partido que con su práctica puede convencernos que no todo es  utopía, que también existen realidades, conquistando objetivos que, la  educación oficial, la religión y los medios de comunicación, nos  transmitieron la idea que eran aspiraciones imposibles y que solamente  una sociedad dividida en clases era garantía de competitividad y avance social. 

Reconocemos que en nuestro país existe un tipo de izquierda que solo  vive para oponerse a cualquier iniciativa, buena o mala, porque no se  ha preparado para gobernar, menos sabrían que hacer de llegar al  poder. También existen las que al haber claudicado a su misión  histórica han optado por el camino del empresariado bancario, laboral,  ONG, etc., generando una vil traición al encargo popular. 

PERÚ LIBRE tiene principios claros, es democrático, descentralista,  internacionalista, inclusivo, soberano, humanista y antimperialista.  Practica los cinco principios de las ciencias sociales para el logro de  sus objetivos, unidad, compromiso, identidad, decisión y acción. Por  más que invoque paradigmas internacionales no es antagónico a la  praxis y aspiraciones de nuestros pueblos originarios.

Somos un partido forjado al interior del Perú Profundo, en los Andes del  Perú, que no solo cuestiona el centralismo forjado por los partidos de  derecha, sino también la indiferencia de algunos partidos de izquierda  capitalina que, con su neutralidad “democrática”, permitieron la  consolidación del neoliberalismo en nuestra patria. Nuestros  cuestionamientos los realizamos con un espíritu constructivo, con argumentos objetivos y utilizando la herramienta de la crítica como  medio y no como fin. 

PERÚ LIBRE es expresión contestataria de los pueblos marginados; palabra descentralista del poder político y económico; expresión de las  luchas antineoliberales contra dictadura del capital o del mercado;  expresión de nuestros derechos laborales; expresión del rescate de  nuestras empresas privatizadas y de nuestros recursos naturales;  expresión del anhelo popular de un nuevo modelo de producción;  expresión de la restitución de los derechos fundamentales; expresión  de los derechos comunales andinos y amazónicos; expresión de un  proyecto de país y no de un proyecto de grupo empresarial; y finalmente  expresión del internacionalismo latinoamericano.  

La historia nos demuestra que, desde Túpac Amaru II, la revolución  peruana iniciada por él, aún no ha concluido, razón por la cual este  proyecto socialista debe evidenciar en sus planteamientos y objetivos  la trascendencia histórica del mismo, construyendo con  responsabilidad y coherencia un futuro distinto en beneficio de las  grandes mayorías del país.  

Ser de izquierda en un océano neoliberal o capitalista implica vocación  de servicio y ocasionalmente sacrificio. Significa tres cosas  fundamentales, ser defensor del medio ambiente, luchar a favor de la  paz mundial y poner cualquier avance tecnológico o social al servicio  de la humanidad. Razones por las cuales nuestra organización no debe  confundir los roles del Partido y la del gobierno, una crea las  condiciones subjetivas y la otra las objetivas. 

El Partido va en busca de una nueva sociedad, más equitativa, más  justa, que rescate a sus hijos de la esclavitud moderna en sus diversas  variantes y métodos. Construir esa sociedad no es una tarea fácil,  implica luchar contra nichos de poder, empotrados secularmente no  solo en sus instituciones, sino en nuestras mentes.

Para lograr las aspiraciones del Partido debemos tener en cuenta que  el Partido necesita en su dirigencia, como el gobierno en sus  funcionarios públicos, políticos altamente técnicos y técnicos altamente  políticos, ninguna de estas dos cualidades debe estar divorciada de la  otra, deben estar concatenadas, para que pueda marchar la maquinaria  revolucionaria.