El exmandatario destacó que se considera un «preso político» y que ha sido retenido desde el 7 de diciembre en contra de su voluntad, empleando la palabra «secuestrado».
Durante la audiencia de tutela de derecho solicitada por su defensa, el ex presidente Pedro Castillo negó haber cometido el delito de rebelión, por el cual se encuentra en prisión preventiva debido a la investigación por el golpe de estado del 7 de diciembre de 2022.
En su discurso, el ex mandatario afirmó que su detención había sido arbitraria e inconstitucional. Además, acusó al Congreso de la República de vacarlo de forma «exprés» y de ser un ente obstruccionista desde el primer día de su mandato. Castillo también se refirió a sí mismo como un «preso político» y dijo que había sido «secuestrado» desde el 7 de diciembre.
Luego, afirmó que no se había levantado en armas y que no había coordinado con nadie para hacerlo. Finalmente, la defensa del ex presidente presentó una tutela de derechos para que la Fiscalía de la Nación especifique los hechos que le imputa a Castillo para que pueda ser procesado por el delito de rebelión o conspiración.