Vacadores atentan contra la voluntad del Pueblo Peruano
Por: Alberto Quedas (MAR.2022).
I. SITUACIÓN ACTUAL.
La ultraderecha en el Perú, politiquera por acientífica y no humanista, es dúctilmente servil al poder financiero dominante por su condición de grupo alquilable, continúa manipulando al “Congreso de la República”, fiel a su amo don dinero, y pretende seguir ignorando que el Jurado Nacional de Elecciones – JNE proclamó, los resultados de la Elecciones Generales 2021, dando como ganador al ex candidato presidencial de la República, Pedro Castillo Terrones, con la organización política “Perú Libre”, según Nota de Prensa de fecha 19.JUL.2021, por haber obtenido 8 millones 836 mil 380 votos, que representan más del 50 % de la votación nacional resultante.
II. ANÁLISIS.
Pero también, la ultraderecha tiene otro referente deudor: el acontecimiento histórico que bien debería memorizar y prevenir, por ser hito de honor y patriotismo que conllevó el 19 de Julio de 1977, hace 45 años, en que insurgieron el Pueblo peruano y sus hijos los Trabajadores, ofrendando sus vidas (asesinados y desaparecidos), su libertad al empleo (más de 5 mil despidos y posterior “lista negra de persecución”), y su seguridad familiar (sin reparación socio-económica alguna), para vencer a la dictadura militar hambreadora, criminal y corrupta de morales bermúdez cerruti, a fin de recuperar y reconstruir un Estado democrático y humano.
Transcurren así, más cuatro décadas, pero sus financistas y sus operadores son el mismo enemigo, los mismos corruptores y corruptos de siempre que ejecutan el contrabando ideológico, ahora con el engaño del fraude electoral, la penetración comunista, y el condicionamiento de la gestión pública instrumentada para “robóticamente” permanecer en el piloto automático acostumbrado, sin visión de horizonte duradero, de no creación ni sostenibilidad de nuestro futuro patrio.
Luego, ni confabulaciones, ni ”arreglos” con aquellos golpistas y vacadores, pasarán ante la acción constitucional, más aun, al ser liderados por esos dinosaurios políticos, que nunca tuvieron la capacidad de aportar a nuestra Patria, cuando ejercieron un cargo público (en especial, conocidos operadores apristas, fujimoristas, chimpumistas del Callao, entre otros elementos arribistas, incluso con otra fachada como los violentistas de “Renovación Popular”).
Cabe agregar, que si bien se logró el voto de confianza (para no atentar con su propia permanencia política), se insiste con el sometimiento del poder Ejecutivo, al intentar ahora, la vacancia de algunos ministros bajo el descrédito permanente de su falta de idoneidad para el cargo (Hernán Condori Machado – Ministro de Salud y Ángel Yldefonso Narro – Ministro del Interior).
Cuando los grupetes vacadores congresales se refieren en abstracto a la no idoneidad de los ministros, siendo su función legislativa de responsabilidad, el reglamentar normativamente los requisitos que determinen el alcance de la idoneidad (y no estar encarcelados en pelear con el Gobierno, que por lo demás, es el ejecutor de sus leyes); por lo que debemos precisar en dichos casos, que los ministros deben conservar la calidad de ciudadanos en ejercicio, vale decir en forma preliminar, que:
a. No se observa en los ministros (como son de los sectores de Salud y Justicia), requisitos como el presentar sentencias en primera instancia que los condenen por la comisión de un delito doloso;
b. No registran indultos o amnistías, en casos motivados por delito doloso, pluriofensivo o atente contra los Poderes del Estado y el órden constitucional:
c. No encontrarse inahabilitados por sentencia judicial firme;
d. No tener acusación fiscal por algún delito pluriofensivo, de lessa humanidad y de violencia contra la mujer y la familia; ni condenado por no reconocer hijos/as, u omitan dar asistencia familia;
e. No presentar destitución en la Administración Pública, por causal de falta grave; infracción a la transparencia, acceso a la información pública o al buen gobierno; o haber contravenido contra la ética y valores del ejercicio profesional efectuado; y
f. No haber incurrido en ninguna incompatibilidad legal prevista para la asunción del cargo.
El cumplimiento de los anteriores requisitos, deben documentarse en las Declaraciones Juradas respectivas.
Siendo recientemente, la designación de dichos ministros, ello nos releva de evaluar el mandato constitucional del buen desempeño en la administración de su sector Salud o de Justicia respectivo.
Debe anotarse, que dichos ministros no acreditan estar incursos en la desprotección y la no garantía del cumplimiento de los Derechos Humanos en sus sectores de competencia.
Entre otros criterios constitucionales que obligan cumplimiento a los ministros de Estado, tenemos el de luchar contra la corrupción y el de luchar contra el terrorismo, aspectos puntuales que deberán ser evaluados con los respectivos estándares de medición.
¡Unámonos en una sóla causa válida: Defender y salvar nuestro Perú!.
Con gratitud por su valorada lectura.